Siempre recurrimos a poderes superiores en los momentos más difíciles para nosotros. Ateos y agnósticos cuestionan los poderes superiores durante un accidente aéreo. En mi opinión, Nabokov, utilizando un lenguaje metafórico, se está aferrando quizás al último hilo para descubrir cómo salvar a su país y regresar a su patria. En esta historia se siente mucho dolor, experiencias, sacudidas, tristeza, pena, desesperación, amor por la tierra natal, nostalgia, anhelo por ella en la realidad y en los sueños. Con qué amor se describe la belleza terrenal en contraste con la belleza celestial. La belleza terrenal parece ser un reflejo de la belleza celestial. "La Palabra" es muy clara para mí, porque después de haber pasado algún tiempo en una tierra extranjera, sin saber cuándo regresaría a mi Crimea natal, experimenté una gran variedad de sentimientos, desde la melancolía hasta la desesperación. Nabokov y su familia abandonaron el país en 1919 durante la ocupación de Crimea por los bolcheviques. Después de la Revolución, partir para ellos fue quizás la única manera de salvarse. Nabokov no regresó por el bien de la libertad creativa y por el peligro restante de “castigo” por parte de los bolcheviques que llegaron al poder. Siento mucha simpatía por el autor, porque las líneas están impregnadas del dolor de una persona que añora su lugar natal. Estas experiencias se transmiten maravillosamente a través de una historia a un ángel. Su amor reverente y su deseo de volver a tiempos hundidos en el olvido, como si tomaran una forma tangible, son increíblemente conmovedores y cercanos. En el poema “A Rusia”, Nabokov dice que está dispuesto a renunciar a todo, incluso a su nombre, a sus libros favoritos, a su idioma... para lisiarse a sí mismo. Pero no está repudiando al país, en absoluto. Y de añorarla. En la segunda parte del poema, Nabokov dice que, hasta las lágrimas, lo importante y querido en su corazón es lo que dejó atrás, lo que respiró mientras crecía: las tumbas abandonadas de sus antepasados, los abedules, los queridos ojos de un país ahora “ciego”... Qué claros son sus impulsos de “Palabras” de hablar con un ángel sobre la salvación de la propia patria, qué ingenuos, puros y conmovedores son los impulsos de encontrar esa misma “palabra”. Qué cerca me parece que en su patriotismo no hay patetismo, palabras grandilocuentes, frases pomposas. Regístrese para consultas conmigo. Puede contactarme a través de WhatsApp, Viber, Telegram. - +79786419288.